Un fármaco que borra los malos recuerdos

El mecanismo parece bastante simple; según ha podido comprobar el Dr. Merel Kindt y sus colegas del Departamento de Psicología Clínica de la Universidad de Ámsterdam, bastaría con tomarse una dosis de propanolol (un beta-bloqueante empleado en el tratamiento de la hipertensión) antes de la evocación del recuerdo. Este medicamente rompería el proceso de reconsolidación de la memoria y ésta desaparecería o permanecería en el olvido. Para Merel Kindt, estos hallazgos muestran que se podrán desarrollar técnicas capaces de reducir permanentemente miedos como los del estrés postraumático, fobias y otros trastornos de ansiedad.

Muchos querrán encontrar en él un bálsamo que cure su melancolía, si pudieras ¿qué echarías en el saco del olvido?

Podría olvidar: la primera vez que me caí, que me pegaron, mi primer desengaño, mi primera ruptura, la muerte de un ser querido, el rechazo a lo diferente, la injusticia, la brutalidad, la guerra, el terrorismo… ¡la sinrazón!

Si olvidara todo eso, ¿sería más feliz?, quizá… ¡pero no sería yo!

Pensar, sentir y tener recuerdo de ello está en la esencia del ser humano, Auguste Rodin lo reflejó magistralmente en su más célebre obra: Le Penseur (El Pensador). Os recomiendo la exposición que Caixa Forum ha traído a Madrid.