
A raíz de la ola de pánico generada con la gripe aviar, los gobiernos occidentales acapararon millones de dosis de medicamentos y “vacunas” (de efecto no asegurado) en previsión de una posible pandemia. Poco quedó de todo aquello, salvo las ingentes reservas de medicamentos y los enormes beneficios de las multinacionales farmacéuticas.
A la llamada gripe porcina, con los datos actuales, catalogarla de pandemia resulta, además de un insulto a la inteligencia, de un alarmismo sospechoso. Si bien es cierto que ha habido unos cientos de muertos en México y que el virus se ha extendido de forma natural al resto del mundo, conviene recordar que habitamos la Tierra aproximadamente 6.000-7.000 millones de ciudadanos, de los que el 40% vive en una extrema pobreza e insalubridad y no menos de 35.000 seres humanos mueren de hambre cada 24 horas.
¿Por qué las muertes sólo en México y no en el resto de los países a los que ha emigrado el virus? La respuesta es clara: falta de diagnóstico adecuado y carencias alimenticias. En los países europeos a los que ha llegado algún turista contagiado, tras un periodo de observación de 48/72 horas y con síntomas incluso más leves a la gripe común han sido enviados a sus casas. ¡Claro han sido tratados con los famosos medicamentos (que no voy a citar) acumulados para la gripe aviar y “han evolucionado satisfactoriamente”!
Debemos preguntarnos a quién beneficia esta crisis sanitaria: a las mismas empresas multinacionales que están sufriendo los efectos de la crisis económica y la caída de la demanda de medicamentos. Lógicamente lo que interesa es que los potenciales ciudadanos amenazados (vía un efecto expansivo del miedo a través de los medios de comunicación) lo sean de países occidentales desarrollados que cuentan con recursos suficientes para hacer un nuevo acopio de vacunas y medicamentos antigripales…
Está claro que la gripe porcina “no se manifestará en el África subsahariana, allí no hay mercado y no es noticia”, se los llevará por delante silenciosamente como tantas otras enfermedades endémicas que padecen.